Sueños

No suelo soñar, o mejor dicho no suelo acordarme de mis sueños porque, según dicen los que entienden, todo el mundo sueña. Odio despertar y acordarme de mis sueños, nunca me ha gustado. Los sueños son sobre algo bueno y al despertar te encuentras en la cama y en la misma situación que siempre. Hoy he tenido un sueño genial, hacía muchísimo que no me pasaba, y al despertar...la mierda de siempre. Ojalá existiese un interruptor que poder apagar para evitarlo. Y Calderón de la Barca no tenía ni puta idea y Segismundo era un pringao de mucho cuidado.